Hoy a la noche me ha pasado algo bastante importante.
Viniendo a casa del cine, caminando por la calle, a cada paso que daba iba recordando secuencias de mi vida hacía atrás, con todo lujo de detalles. Visualice en primera persona un montón de recuerdos que habían permanecido dormidos todo este tiempo.
De pronto se ha despertado mi memoria y he recordado todo lo que he vivido en unos minutos, mientras mis piernas me traían a casa.
Nunca me había pasado esto con tanta exactitud, mi memoria ha sido siempre parca, escasa en detalles y a penas recuerdo las cosas más de un año, unos meses o a veces incluso tan solo unos días.
Progresivamente en estos años he ido perdiendo completamente la memoria y he sido víctima de burlas por parte de amigos y familia, por parecer mi mente la de un anciano de 90 años.
Sin saber porque, andando por la calle, la he ido recuperando a golpes de visiones, reviviendo uno a uno las fases más representativas de mi vida, desde hace unos meses a unos años, desde mi juventud a mi adolescencia, desde mi infancia a mi niñez y desde recuerdos de mis 8 años hasta el feto y lo más sorprendente: ¡desde el feto a las primeras semanas de gestación dentro del vientre de mi madre!
Y todo esto me ha pasado sin tener porqué, quiero decir, no había pensando en mi pasado en ningún momento de esta semana y sin embargo de pronto aparecieron estas visiones que iban acompañándose de un moviendo REM de los ojos: rápido y circular, que notaba perfectamente y que no deje en ningún momento de ser consciente de ello.
Y justo allí en la barriga de mi madre, cuando estaba llegando a quien fui antes de nacer en esta vida que me corresponde, justo cuando iba a conocer la anterior, llegué a mi portal, abrí la puerta con mis llaves y entré en casa.
He tenido una fuerte regresión, que espero entender su razón de ser en unos días. Lo que sé es que me siento diferente ahora.
Venía de ver una película que me encantó: «En la tiniebla» de la preciosa y buena Demi Moore (Protagonista de «Ghost») y el príncipe azul de mi subconsciente, que a partir de ahora pasa a ser mi actor favorito. Estéticamente es el hombre de mi vida, lo que siempre he soñado como perfecto y no es que no quiera a Dani, mi pareja, sino que uno siempre imagina desde nuestra juventud al hombre o a la mujer perfecta, que si tuviéramos que crearla, la fabricaríamos de una figura de barro.
Nos pueden gustar más o menos los demás, pero queriendo o sin querer, mantenemos una búsqueda permanente anclada al subconsciente de nuestra idea de persona ideal, nos acercamos, alejamos, seguimos con nuestra vida o nuestra realidad, pero en lo más hondo de nuestro interno, soñamos con nuestra escala de belleza, de inteligencia, labios, personalidad, estilo, peinado o pelo de aquel que imaginábamos y aún soñamos cual sería nuestro amor ideal.
Yo hoy, lo he visto en la vida real, sorpresa de mi en el cine: se llama «Hans Matheson».
Siempre soñé con alguien así: su cara, su cuerpo, su forma de llevar el pelo, sus labios, su forma de vestirse, su carácter, sus respuestas, su vida, sus reacciones en su personaje en esta película, parecía sacado todo de mi subconsciente y convertido en un ser real.
A lo mejor en persona es un insoportable, pero en esta película es perfecto en todos los sentidos. Así que déjame soñar…
Me pregunto, ¿Cómo será en realidad este hombre? ¿Qué leerá por las noches cuando se mete en la cama?, moriré sin saberlo, … y sin besarle…
En está vida he conocido a Dani hace ya muchos años, que no es igual, que ni tan siquiera se le parece, pero le quiero igualmente y mi subconsciente tendrá que adaptarse a lo que mi consciente siente en estos momentos.
A veces las ideas de la persona ideal solo nos valen para visualizar, para soñar y solo queda en eso, en una utopía, pero al mismo tiempo nos ayudan a ver que la vida es mucho más allá de lo que deseamos, de lo que imaginamos y que existe una realidad bien diferente que no ha sido planificada.
Es bueno ser conocedores de que estos hechos nos rodean e invaden la existencia y que nos inclinan a ir en una dirección o en otra.
A esa realidad se le llama destino, y cada uno tiene el suyo.
En el amor pasa esto mismo, se pone en nuestro camino, de pronto aparece cuando menos lo imaginamos o invocamos y aunque no sea nuestro chico/a ideal será muy importante en la medida de que será con quien viviremos las experiencias importantes de nuestra vida, experiencias vividas en común, con sentimientos mutantes, que se estirarán y encogerán, que crecerán y menguarán y que solo las estrellas conocen su final.
Plantearse que es el amor es imposible sin recordar una frase que escribí hace algunos años:
«Lo importante no es lo que la vida nos enseña, sino lo que aprendemos nosotros de la vida»
El amor es lo que recibes de lo que te dan, NO lo que NO llega, ya que si no eres consciente de que existe, ese amor solo es pensamiento obsesivo, sentimiento: electro espasmo que solo siente quien lo padece.
Esos sentimientos al no salir de donde nacen, no llegan jamás a quien no los recibe, aunque se viva de manera intensa no dejará de ser un amor platónico secreto. Hay que manifestarlo al ser que amamos con hechos y palabras, con caricias y abrazos. El amor que interesa es el que recibimos, más que el que sentimos, en esa acogida de esa energía exactamente existe esa sensación de plenitud, que es lo que yo entiendo cómo parte práctica e interesante del amor y es lo que tengo precisamente con mi pareja, Dani y yo nos fusionamos cada noche que dormirnos juntos desde que nos conocemos y no estoy hablando de sexo, sino de fusión de una complicidad y energía viviendo una vida conjunta, donde los dos somos uno frente a nuestras enormes diferencias.
Si señor, ir al cine hoy, no ha sido casualidad. Éramos en la sala unos 8 espectadores, y la película. ¡Que gran película!
Un día completo, desde las 10 de la mañana cuando me he levantado para ir a una sesión con mi psicóloga con la he estado hablando una hora y medía como vengo haciendo cada 15 días.
Hemos hablado de un montón de cosas, que ya te contaré.
Ahora quiero disfrutar de este Déjà vu en mi soledad y hacerme algo de cena, ensalada para variar, últimamente no como otra cosa.
Ha sido un día importante para mí en el calendario: 12 de Junio. Así que lo señalo *******